Son incontables las películas, series, libros y cómics en los que hemos podido imaginar un futuro de convivencia entre humanos y robots. Ya en 1968 Stanley Kubrick visualizó un 2001 en el que la Inteligencia Artificial (IA) no solamente estaba dotada de autonomía, sino también de emociones y sentimientos. En el auténtico año 2001, lo de las casas inteligentes aún quedaba un poco lejos… Pero ahora en 2019 es mucho más cotidiana de lo que parece.
Qué es la IA
Se trata de un sistema informático que simula los procesos de la inteligencia humana mediante algoritmos que imitan las conexiones neuronales. Hoy en día, existen dos ramas de la Inteligencia Artificial que están dando mucho que hablar:
• Machine Learning. Son sistemas de aprendizaje autónomo. Las máquinas son capaces de identificar patrones complejos a partir de millones de datos, lo que permite predecir comportamientos y anticiparse a determinadas situaciones. Google, Amazon, Netflix… numerosas plataformas lo utilizan para mejorar tu experiencia.
• Deep Learning. En un nivel superior al Machine Learning, el Deep Learning persigue una auténtica imitación de las redes neuronales del cerebro humano, tanto que para desarrollarla se están aprovechando los conocimientos de la neurociencia, los estudios de casos clínicos de daño cerebral y los avances en diagnóstico por imagen.
Usos de la IA más cercanos y alejados
En nuestro día a día, nos cruzamos con sistemas de inteligencia artificial en muy diversos contextos:
Entretenimiento
Los villanos de tus juegos favoritos son IA. Desde los más sencillos, como los fantasmas del clásico Pac-Man, hasta los más modernos. Un gran hito de la Inteligencia Artificial en este ámbito fue la máquina Deep Blue de IBM, que en 1997 derrotó al campeón del mundo de ajedrez Garry Kasparov.
Fotografía
Los smartphones de última generación están dotados de cámaras con IA y reconocimiento facial. Son capaces de detectar qué es lo que aparece en la foto (comida, paisajes, edificios…) y ajustar las condiciones para garantizar la mejor toma.
Otra posibilidad que ofrece esta tecnología es la traducción de textos en otros idiomas sin necesidad de teclear en Google Translate ni Wordreference, simplemente a través de la imagen.
Internet of Things
Las opciones inteligentes están llegando a las bombillas, a los enchufes, a los electrodomésticos y hasta a los cepillos de dientes. Estos dispositivos pueden aprender de tus rutinas y necesidades gracias a la IA y hacer que tu hogar sea cada vez más confortable.
La realidad es que todos los sectores imaginables pueden aprovechar las virtudes de la Inteligencia Artificial. Salud, transporte, seguridad, logística… Tanto a nivel usuario como industrial y profesional, la tecnología es ya uno de nuestros recursos más preciados y nos permite creer en un futuro más pleno, cómodo y cargado de posibilidades.